En su cuarto partido en el Mundial de Serbia, la Selección Argentina femenina cayó ante Polonia 31-17. Las chicas no tuvieron un buen segundo tiempo frente a un rival que sacó importantes diferencias en la última parte del encuentro. Mañana desde las 11:45 cerrarán su participación en el Grupo C ante Paraguay.
Argentina llegaba al partido con Polonia luego de tres partidos encima donde por momentos pudo jugar de igual a igual ante rivales que en este momento están por encima dos o tres escalones. Con estos buenos antecedentes y todavía con alguna chance de clasificar a los octavos de final (debía ganar sus dos partidos y esperar una caída de las polacas ante las noruegas en el último partido), la Selección puso lo mejor en cancha para intentar ratificar lo mostrado hasta acá y por qué no, soñar con dar la nota en el Mundial.
Ese desafío, el de volver a hacerle un gran partido frente a una potencia europea, se vio rápidamente truncado con un parcial de 6-1 a favor de las polacas. Sin embargo, lejos estuvieron las chicas de Eduardo Peruchena de bajar los brazos. El andar de Argentina en los treinta iniciales fue de menor a mayor: de varios errores de manejo en el posicional pasó un buen trabajo con el pivot para sacar varios 7mts con exclusiones de jugadoras polacas incluídas. Luciana Mendoza (goleadora con 6), 100% efectiva desde la línea, le dio esa cuota de confianza a la Argentina para meterse en el partido. Con algunas limitaciones en ataque, pero con una fuerte defensa siempre bien acompañada por un alto porcentaje de atajadas de Marysol Carratú, Argentina supo mantenerse expectante en el resultado. Aquella diferencia de cuatro/cinco goles de los primeros minutos se mantuvo hasta el 14-9 con que finalizó la primera parte.
La sensación era que mejorando un poco en el ataque las dirigidas por Eduardo Peruchena podrían acercarse aún más. Tras un comienzo un poco desdibujado donde Polonia comenzó a hacer daño con sus rápidos contraataques, Argentina respondió con un parcial de 4-0 para volver a acercarse a cuatro y obligar al técnico polaco a pedir tiempo muerto. Ese fue el momento de las chicas, porque pese a sufrir la baja de Crivelli (se resintió de la lesión en el hombro) y las exclusiones casi de forma consecutiva de Decilio y Mendoza, siguió respondiendo en defensa sumado a buenas resoluciones en ataque. Sin embargo, Polonia ajustó la defensa, salió a buscar un poco mas arriba y complicó nuevamente el posicional argentino. Muchas pérdidas, contraataques polacos y un partido que tomo un rumbo similar al de Noruega. Parcial de 9-1 que inclinó la balanza hacía un lado. Un quiebre que nunca pudo ser reparado y que derivó en una total rotación del equipo pensando durante los diez finales pensando ya en el duelo decisivo de mañana ante Paraguay que definirá si las chicas irán por el puesto 17/20 o por el 21/24.
Formación inicial: Marysol Carratú, Antonella Gambino, Luciana Mendoza, Victoria Crivelli, Manuela Pizzo, Valeria Bianchi, Magdalena Decilio.
Goleadoras: Luciana Mendoza (6), Magdalena Decilio (3), Antonella Gambino (2), Valeria Bianchi (2), Elke Karsten (1), Antonella Mena (1), Natalia Vico (1) y Noelia Sala (1).
La cordobesa presente
El plantel salió al Kristalna Dvorana con una remera que llevaba en el pecho la leyenda «Fuerza Lula». El apoyo de las quince jugadoras argentinas para Lucía Haro, quién sufrió el día martes la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla.
Rodrigo Alzugaray – Prensa CAH