Del 1º al 5 de noviembre se disputará en Santiago de Chile el Panamericano de Clubes Femenino, en el que Ferro Carril Oeste será el representante de Argentina, como campeón nacional.
El conjunto de Caballito compartirá el Grupo B con Ovalle de Chile, Goes de Uruguay y San José de Paraguay. Ferro contará con dos jugadoras como refuerzo: Leila Niño, de CIDECO y Rocío Campigli, de Estudiantes de La Plata.
Victoria Crivelli, central del Verdolaga y de la Selección Argentina, dialogó con nosotros a horas de embarcar rumbo a esta nueva experiencia para una jugadora que tiene muchas batallas internacionales encima con la albiceleste.
Se viene el Panamericano de Clubes, ¿qué pesa más en la cabeza, la competencia en sí o ser parte de un hecho histórico?
Me parece que lo que más pesa es participar y formar parte de un hecho histórico y jugar esa competencia con la camiseta de Ferro. Las dos cosas tienen mucho peso en sí mismas cada una y no puedo elegir una por sobre la otra. Es algo muy bueno ser el primer club femenino de Argentina que participa en un torneo panamericano. Pero para nosotras lo más valioso es estar representando a Ferro fuera del país.
¿Con qué expectativas va Ferro al Panamericano de Clubes?
Nuestras expectativas tienen que ver con lo que nos proponemos siempre en cada torneo que jugamos. Si bien conocemos a los rivales, no sabemos 100% a qué nos vamos a enfrentar. Las expectativas siempre son dejar a Ferro en lo más alto y, para este torneo en particular, lograr un podio panamericano sería un sueño.
En el imaginario popular, el gran rival es Metodista de Brasil, ¿es el rival a vencer o ya tienen identificados otros rivales complicados?
Todos sabemos lo que representa un equipo de Brasil, sabemos que allá el handball es semi profesional. Ningún partido creo que vaya a ser fácil y ya estuvimos viendo algo. Conocemos algunos equipos y algunas jugadoras por los torneos que jugamos con la Selección Argentina y creo que nuestro partido más duro en la zona me arriesgo a decir que será el primero, contra Goes de Uruguay. Ellas tienen muchas jugadoras de la selección uruguaya, al entrenador de la selección y plantean una defensa muy abierta, además de tener una base de equipo que fue la que jugó en (los Juegos Panamericanos de) Toronto. Ese va a ser uno de los partidos más importantes, sin sacarle importancia al resto porque son los campeones de cada liga.
El sueño de los clubes de Argentina es ganar un Panamericano, ¿qué tanto pasa eso por las cabezas en Caballito?
En principio, nuestro sueño y lo que pasa por las cabezas en Caballito ya es participar de este torneo. Es lograr después de tantos años de esperarlo -venimos de ser Campeonas Nacionales dos años seguidos- poder jugarlo, creo que el sueño pasa por ahí, por pensar en ponerse la camiseta verde fuera del país.
Nos vamos!! Panamamericano femenino Chile 2016 pic.twitter.com/bd2n4enDxO
— Gustavo Sciglitano (@Gussciglitano) 31 de octubre de 2016
¿Qué sienten de ser parte del crecimiento del handball femenino en el continente, primero con La Garra en un Juego Olímpico y ahora con la disputa del Panamericano de Clubes?
Se siente alegría, se siente felicidad, se siente que vale la pena todos los años que se le entregaron a esto. Lo que vivimos este año con La Garra en Río fue único y ahora, con la posibilidad de ir al Panamericano de Clubes con Ferro, creo que es un año de sueños que se cumplen. Hoy es un orgullo que haya sido La Garra la que jugó por primera vez un Juego Olímpico y que haya sido Ferro el que quede en la historia por ser parte del primer Panamericano femenino
Mucho se dijo últimamente al respecto, ¿es Ferro el mejor equipo en la historia del handball femenino argentino?
Para mi no es importante hablar de quién es el mejor equipo o el más ganador. Hay épocas, el handball también va cambiando. Me acuerdo de ver a un gran SEDALO, al que yo creía que nadie le podía ganar, lo mismo el Luján de Raqui (Peruchena), pero no puedo hablar del mejor equipo de la historia. Sí creo que marcamos un momento, que pudimos mantener el hambre más allá de los títulos, cosa que todavía conservamos para querer y poder seguir ganando. Así que no puedo hablar del mejor equipo, pero sí de un gran equipo, que marcó un momento y una historia por haber ganado seis títulos seguidos y once de 2013 hasta ahora.
La salida de Marisol Carratú trajo también un bajón de rendimiento del equipo, ¿cómo creés que funcionarán los refuerzos de Leila Niño y Rocío Campigli?
Marisol es muy importante en el equipo, adentro y afuera de la cancha, y no hace falta hablar de lo gran arquera que es. Aporta desde otros lugares, se siente su ausencia, se la extraña, pero siempre vamos para adelante con lo que tenemos. Y respecto de los refuerzos, justamente vienen a eso: reforzarnos. A reforzar una base de Ferro que hace años viene logrando cosas y ellas lo viven así también, saben que vienen a dar una mano, que vienen a ayudar. Es un torneo en el que se juega todos los días y el cansancio se nota, por lo que tener más rotación es importante. Son chicas que Gustavo (Sciglitano) las eligió por sus características deportivas, pero también que pueden funcionar bien en nuestro grupo, que es algo a lo que en Ferro se le da mucha importancia. Estamos contentas de recibirlas, ellas están contentas de acompañarnos y vienen a darnos una mano en esta aventura panamericana.
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