El extremo salido de Nuestra Señora de Luján le puso punto final a una carrera deportiva que lo tuvo como pieza clave con la Selección Nacional y a través de la cual recorrió el mundo.
Gonzalo Matías Viscovich comenzó a jugar a jugar al handball en el colegio, Nuestra Señora de Luján, y recién este fin de semana lo dejó (por lo menos de manera activa). En esa institución se consagró campeón de practicamente cuanto torneo jugó, formando parte de una de las dinastías más importantes de la historia del handball nacional.
Dueño de un salto y cualidades técnicas excelentes, el «Chivo» emigró al exterior para probar suerte en Brasil. Primero fue Flamengo, cuando el gigante carioca se aventuró en el balonmano, pero fue en Metodista donde también dejó un legado como miembro del conjunto paulista. Europa le abrió sus puertas en el Pozoblanco español, para luego viajar a Italia para jugar en Siracusa, Noci y Teramo. Volvió a España para representar a un equipo siempre amigo de los argentinos, el Ciudad Encantada, y terminó su carrera en el Atlético Valladolid.
Sin lugar a dudas fue en la Selección Argentina donde Gonzalo dejó su marca más imborrable en la memoria de todos los handboleros por estos lados del planeta. Con la camiseta nacional, fue parte del plantel que consiguió la primera clasificación mundialista en Colorado Springs 1996 y también disputó el primer Mundial para Argentina, en Kumamoto 1997. También logró el primer título continental en el Panamericano de San Pablo, cosa que repitió en Buenos Aires 2002. En total, disputó 6 Mundiales Adultos (Japón 1997, Egipto 1999, Francia 2001, Portugal 2003, Túnez 2005 y Croacia 2009), además de uno en Juniors, el de Argentina 1995.
Sus goles, tanto en el extremo como en el lateral izquierdos, quedarán en la memoria de muchos durante años, pero seguramente haya tres que piquen en punta: el primer gol en un Mundial (ante Suecia en Kumamoto 1997), el agónico gol del empate ante Argelia en Francia 2001 para sellar el primer pase a segunda ronda de la historia y el tanto de la victoria frente a Croacia en Portugal 2003, primer triunfo ante un europeo en la historia.
Felicitamos a Gonzalo Viscovich por tamaña carrera deportiva y le agradecemos por tantos años y dedicación con hacia la Selección Argentina.
Pablo Monti
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Hoy se despidió un grande, me toco debutar contra el invencible lujan en el 98 y lo sufrí a el durante muchos años, por suerte lo disfrute mucho tiempo en la selección, un refentente y uno de los mejores compañeros y jugadores argentinos que vi, gracias gonzalo viscovich pic.twitter.com/bxNgMRUZpl
— Gonzalo Carou (@CarouGonzalo) 19 de mayo de 2018
